24.10.05

Preguntas post-electorales.

¿Votar a alguien que uno sabe que no va a ganar es el máximo gesto democrático-romántico, o es tirar el voto nomás?

¿Cómo se interpreta que Cristina K., candidata a senadora, no haya ido a votar a Santa Cruz (en donde está domiciliada) para quedarse a esperar en Capital los resultados? ¿Es el famoso "haz lo que yo digo (votáme) mas no lo que yo hago (ni en pedo voy a votar)"?

¿No hay un error de proporciones entre el tamaño del sobre y el tamaño de la boleta (bastante más grande)? ¿O es una forma de metaforizar los dobleces de la política?

¿Para qué se presentó Moria?

¿No les dio la impresión de que había más gente haciendo cola para justificar su no-voto en las comisarías que gente haciendo cola para votar?

¿No les da cierta satisfacción tener un sellito más en el DNI, como si fuera un álbum de figuritas a llenar? ¿Qué premio nos darían con el álbum lleno?

¿Esperaron como yo casi hasta el último momento para decidir a quien votar, a ver si en el cuarto oscuro sobrevenía -vaya paradoja- una especie de iluminación reveladora?

¿Miraron los programas televisivos posteriores al cierre de los comicios esperando que algún candidato perdedor empezara a boquear barbaridades?

¿No estaría bueno instituir el "regalo del día de elecciones", al menos para tener alguna satisfacción ese día?

3 Comments:

Blogger Pavo Colonio said...

Sí, era yo. ¿Y vos quién eras? ¿O sos?

1:35 a. m.  
Blogger Levín said...

El premio por el álbum lleno es la muerte.
Hola Rapo.

8:11 p. m.  
Blogger Pavo Colonio said...

Ah, ¿cómo? ¿No es una pelota de fútbol Nro 5? Entonces no sé si quiero seguir llenando...

Hola, Levín. ¿Qué es eso de andar emborrachando amigas extraidas de tertulias literarias?

1:21 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home


Website stats